Lino
Un buen día, harán unos tres años, me parece, mi hijo Lino me dijo papá enséñame a tocar la guitarra.
Así, sin anestesia.
No es fácil aprender a tocar un instrumento. Te enfrentas las primeras veces que lo coges entre las manos con un enemigo despiadado.
Del violín he oido que no consigues que deje de sonar a gato moribundo hasta despues de cuatro o cinco años de estudio incesante.
De los de viento me comentan que toda una vida no es suficiente.
La guitarra, como el piano, a los pocos días empiezas a tener una cierta ilusión de que a lo mejor lo conseguiré. Después de todo en el piano solo se trara de pulsar un botón llamado tecla, que suena, sí o sí. Y en la guitarra, le das a una cuerda cualquiera sin pulsar traste, y la caja de madera con forma de mujer te engaña emitiendo un sonido precioso.
Falacias.
En el piano cada tecla tiene unos diez millones de maneras matizadas de pulsarla, eso sin exagerar. Exagerando unos mil millones. Y en la guitarra, parecido.
Pero esa mentira (propia del mundo del arte) te seduce y te induce a seguir creyéndote que lo vas a conseguir.
En el caso de Lino, además, es que el tío estaba empeñado. Y cuando Lino se empeña, te quitas de enmedio? por favor?
Muchas horas, muchas...pero muchas. Y empezó a sonarle muy bien.
Papá toca Blackbird... que yo lo vea, y unas horas despues volvía y lo tocaba...mejor.
Cómo será, que al poco tiempo le estaba dando clases a un grupo de padres del APA de su instituto como actividad extraescolar.
Cómo será que al poco tiempo, menos de un año, estaba dando un concierto homenaje a Smashing Pumpkins en la mítica sala Q de Sevilla, con un grupo que había montado poco antes.
Cómo será que en la fiesta de fin de curso de su instituto su grupo fue el fin de fiesta apoteósico.
Cómo será que vió un anuncio de un grupo veterano que buscaba guitarra solista y sacó la plaza. Ahora los domingos por la mañana se los pasa ensayando con gente experimentada. Aprendiendo, disfrutando de ese ambientillo.
Me acuerdo el día que le compramos su guitarra eléctrica. Quedé con un montón de amigos de mi edad, roqueros antiguos, algunos reconvertidos en burgueses, algunos aun con la estética de cuando éramos un poco mas jóvenes, pero todos amigos, todos enrtendiendo de guitarras, todos queriendo escoger la mejor para Lino. Fue muy divertido, y emocionante.
No lleva nada, apenas unos tres años. No se hasta donde va a sorprendernos mi hijo Lino.
Imagino que hasta el infinito, y mas allá.
Pero es que además, le dió por el teatro, protagonizó una obra, y le dieron el premio al mejor actor de Sevilla.
Y además está aprendiendo japonés.
Y va a empezar a estudiar Filosofía, creo que él y dos o tres personas mas.
Además se busca la vida metido en una compañía de animación, entreteniendo niños, y cobrando por eso.
Me agota, y me encanta.
Pero sobre todo me llena de orgullo.
9 comentarios
toi -
lluvia -
uca -
jesús Beades -
toi -
Gracias Peeble, sí que es guapo el tío, parece una estrella del rock
Gracias Reailia, no te equivocas, nunca lo haces
Gracias Irene. Se parece a mi pero en guapo, y en bueno.
Irene -
De nuevo me repetiré: qué envidia dais!!!
Ah! Y parece que también se te olvidó decir que es calcadito a su padre, ¿me equivoco?
Reailia -
Y si en algo me he equivocado, vas y me corriges. (jejeje)
Peeble -
y se te ha olvidado decir que además es un guaperas...
xxx
Casta Niebla -
Es cierto... en el teclado y en la guitarra, si te dicen dónde poner los dedos... al menos suena un acorde.
Pero de ahí a saber tocar el instrumento hay un abismo de distancia.
Yo intenté... me gustaba y tenía un buen profesor. Pero... no practicaba demasiado.
La primera canción que aprendí a tocar fue Luna Tucumana, una zamba.
Y al día de hoy... Zambas es casi lo único que toco, es que el rasguido de la chacarera es complicado, nunca se donde poner el golpe y termino haciendo chacareras truncas. Y el Chamamé necesita un rasguito más veloz y mis uñas hace un ruido horrible sobre las cuerdas.
Mi Malvina, es una linda guitarra, fue de mi papá. Y Cafrune... tocó en ella cuando papi recién la compró y se la mostró. Malvina es una Antigua Casa Nuñez, tradicional casa de luthiers acá en Argentina.
Es una guitarra preciosa, además de que muy cara a mis afectos. Pero su mástil es algo grueso para mi mano chiquita. Entonces nada de usar FA, SOL m, SI m o algún # y/o bemol. Yo soy feliz con el LA m, el Mi m, SOL (como el que hace tu nene) etc.
Al final descubrí que el punteo y los arpegios me son más amigables, pero para entonces Malvina ya descansaba en mi ropero, la Facu ocupaba todo mi tiempo y ya no podía ir a las clases.
En fin que todo esto es pa decir que, innegablemente, tu nene tiene talento y genio musical. Y hay que aplaudir a los padres sabios que le dejan desarrollar eso y a él que con valentía se lanza a la aventura del arte pues no todos se animan a perseguir un sueño vocacional así.
Felicidades Toi, por el nene que tenés!!!!!